Mesoterapia
Este tratamiento es sobre todo muy efectivo para las pieles más jóvenes que aún no tienen arrugas muy marcadas, siendo especialmente útil para prevenir las arrugas (1).
Se trata de un procedimiento en el que se introduce en la epidermis un cóctel de vitaminas y ácido hialurónico con propiedades hidratantes y nutritivas que ayuda a estimular la producción de colágeno y elastina (2), favoreciendo así la regeneración de la piel.
El tratamiento se realiza a través de microagujas, sin provocar dolor, hematomas ni inflamación, por lo que se trata de un procedimiento totalmente seguro.
El efecto es visible después de la primera sesión, aunque se recomiendan entre dos y tres sesiones para un resultado óptimo que dura entre 4 y 8 meses.
Plasmolifting
El plasmolifting es una terapia en la que se extrae sangre del propio paciente para centrifugarla y con ello obtener un concentrado de plaquetas para inyectarlo posteriormente en la zona donde se encuentran las arrugas del cuello que se quieren quitar.
El resultado es una piel de aspecto rejuvenecido y con las arrugas más difuminadas.
Redensificación
Este tratamiento es también muy efectivo para eliminar los anillos de Venus del cuello.
Consiste en inyectar en la piel un cóctel a base de ácido hialurónico y un complejo dermorestructurante compuesto por nutrientes, aminoácidos, antioxidantes, minerales y vitaminas para activar las funciones de las células de la piel en la zona y, como consecuencia, alisar las arrugas mejorando la textura, la elasticidad y la hidratación.
Lo ideal es realizar un mínimo de 3 sesiones al mes y sus resultados pueden permanecer hasta 8 meses.
Inductores de colágeno
Este tratamiento consiste en introducir en la epidermis infiltraciones de hidroxiapatita cálcica y policaprolactona (4) en una solución más diluida que en el rostro, ya que la piel del cuello, además de ser más delicada, se vuelve más fina con el paso de los años, lo que provoca la aparición de arrugas.
Los inductores de colágeno, como su nombre indica, inducen a la formación de colágeno nuevo, que recupera la firmeza en la zona del cuello y el escote.
Lo ideal para un resultado excelente es realizar unas tres sesiones anuales.
Toxina botulínica
El tratamiento antiarrugas más demandado de la medicina estética no invasiva también es efectivo para tratar los anillos de Venus.
Una sesión es suficiente para ver resultados que duran alrededor de 6 meses.
Hilos tensores
Se trata de hilos de PDO (polidioxanona) muy delgados que se colocan con agujas en la zona a tratar.
Es uno de los tratamientos más efectivos y seguros para la zona del cuello, ya que los hilos se reabsorben por el organismo al cabo de tres meses (5).
Sin embargo, como ya han provocado antes la formación de nuevo colágeno y elastina, la piel siempre estará más firme y lisa después de cada sesión.
Relleno de anillos de Venus
Este procedimiento consiste en rellenar las arrugas horizontal que forman los anillos de Venus con un tipo de ácido hialurónico denso, creado específicamente para las arrugas más profundas del rostro y el cuello.
A la hora de aplicar el ácido hialurónico, este se introduce en la piel pinchando sobre el surco de la arruga y retirando la aguja hacia atrás, de manera que el producto disminuya visiblemente la profundidad de cada uno de los anillos.
Para ver resultados, es suficiente con realizar una sola sesión anual.