Cuándo empezar a utilizar una crema antiarrugas
La edad concreta a partir de la cual empezar a usar cremas antiarrugas no es estándar sino que depende de cada piel.
No todos envejecemos igual y varía en gran medida de factores internos, como la herencia genética o la acción que los radicales libres, y factores externos como el sol, la polución o la contaminación.
Además, el tipo de piel también determina la aparición más o menos temprana de las arrugas.
Por ejemplo, por su falta natural de lípidos (grasas) y agua (hidratación) la piel seca tiende a mostrar los signos de la edad antes que la piel mixta o grasa.
También sabemos que a partir de los 25 años disminuye la producción de colágeno (2), la proteína que mantiene la firmeza y tersura natural de la piel, y es a partir de los 30 cuando esta se acelera a razón de una pérdida del 1% por año; yendo en aumentando en los años posteriores.
Consejos según la edad para empezar con las cremas antiarrugas
A continuación, te contamos qué rutina facial adoptar según tu edad y cómo adaptarla con el paso de los años:
A partir de los 20
En el caso de las arrugas y la pérdida de firmeza facial la prevención es el mejor remedio posible para retrasar la aparición de los signos del envejecimiento.
Para ello, a fin prevenir lo máximo posible los primeros signos de la edad es primordial que tu rutina facial incluya los siguientes pasos (3):
- Limpieza facial: imprescindible tanto de día como de noche. Si la piel no está totalmente limpia se acumularán partículas de suciedad en la superficie e impedirán la correcta absorción de los principios activos de los cosméticos que apliques después.
- Tónico o agua facial: te ayudará a eliminar las posibles impurezas que no se hayan eliminado con la limpieza facial y aportará el agua necesaria para sellar la hidratación. Para aumentar el efecto hidratante, aplica tu crema cuando el tónico aún no se haya absorbido del todo.
- Hidratación facial: elige cremas hidratantes suaves que incluyan activos antioxidantes, como la vitamina C, para que así actúen como un escudo facial ante los daños de los radicales libres.
- Protector solar: el sol es el principal agente del fotoenvejecimiento facial así que si quieres prevenir la aparición de las arrugas, usar protector solar de protección alta (50) o muy alta (50+) a diario es imprescindible. Recuerda que el sol no incide en la piel solo en verano sino también durante el resto del año (1).
A partir de los 30
Esta edad es el momento más recomendable para empezar a tratar las primeras arrugas y líneas de expresión con una crema antiarrugas específica para los 30 años.
Elige la que se adapte mejor a tu tipo de piel (normal, mixta, seca, sensible o grasa) y a las necesidades concretas de tu rostro.
Obsérvalo para ver qué problemas son más evidentes y si necesitas incidir más en las arrugas o bien en la pérdida de firmeza o luminosidad.
A partir de los 30 es importante:
- Rutina diaria y rutina nocturna: de día, elige cosméticos con protección solar alta y activos antioxidantes, como las vitaminas C y E, que frenen la acción de los radicales libres y potencien la fase protectora de la piel. Por la noche, cuando la piel entra en fase de regeneración, activos como el ácido hialurónico reparan y ayudan a a mantener la hidratación de la piel.
- Cuida el contorno de los ojos: con un producto específico para el contorno de los ojos que evite bolsas, ojeras y arrugas. Esta zona es la más delicada del rostro y la primera que muestra los signos de la edad y el cansancio.
A partir de los 40 años
Alrededor de los 40 años la pérdida de colágeno y elastina desciende drásticamente, por lo que la piel puede presentar rápidamente falta de firmeza y descolgamiento; y en este sentido, las cremas antiarrugas para 40 años pueden ayudar mucho.
Esto ocurre sobre todo en zonas con más tendencia a acumularse la grasa y los líquidos, como la papada.
- Utiliza productos de hidratación intensa: enriquecidos con péptidos o ácido hialurónico, pero también con un extra de nutrición, con ingredientes como las ceramidas, ya que las glándulas sebáceas empiezan a producir menos aceites en esta etapa.
- Mayor acción antiarrugas: es interesante introducir por la noche activos como el retinol o su versión vegana, el bakuchiol. Estos se consideran los reyes antiarrugas por su gran capacidad de estimular la producción de colágeno.
A partir de los 50 años
Entre los 50 y los 55 años las mujeres entran en la menopausia, cuyos cambios hormonales pueden incidir en la calidad de la piel (4).
En este momento es cuando desciende en picado la producción de grasa de las glándulas sebáceas. Como la piel está más seca, se vuelve más propensa a la aparición de arrugas.
Además, la piel pierde hasta un 30% de colágeno lo que favorece la aparición de arrugas y de manchas.
En esta etapa es importante prestar atención a tu rutina facial y usar productos específicos para mantener la piel lo más saludable y luminosa posible.
- Limpia día y noche: evitando los productos muy astringente para que la piel no se deshidrate fácilmente.
- Elige cremas antiarrugas más nutritivas: para contrarrestar la pérdida de secreción sebácea de la piel.
- Utiliza activos con efecto lifting: los ingredientes con efecto tensor, como el ácido hialurónico, el retinol y la vitamina C te ayudarán a mantener la piel hidratada y lisa.
- Cuida el cuello y escote: para prevenir las arrugas y un descolgamiento visible.
- Introduce los alfahidroxiácidos (AHA): como el ácido láctico o glicólico. Estos realizan una renovación de la superficie de la piel que te ayudarán durante la fase de reparación nocturna en tu rutina de noche.